El mercado global de criptomonedas comienza a recuperarse, aumentando ligeramente hasta alcanzar una valoración total de 2.95 trillones de dólares, lo que representa un incremento del 2.84% en las últimas 24 horas. Bitcoin se ha sumado a este movimiento, subiendo más del 3% y cotizando alrededor de $86,395.
Según la estructura actual de la Onda de Elliott compartida por un analista, el último movimiento de precio de Bitcoin se asemeja a un rebote de la cuarta onda. Los analistas habían señalado anteriormente la posibilidad de un movimiento ascendente de cinco ondas seguido de una corrección, y el gráfico parece estar siguiendo exactamente ese camino.
Recientemente, Bitcoin realizó un pequeño impulso de cinco ondas al alza, retrocedió hasta el soporte y ahora podría estar formando la siguiente etapa dentro de un patrón correctivo ABC más amplio. Si esto se cumple, BTC podría subir hacia los $88,640, lo que coincide con el nivel de extensión de Fibonacci del 100%. La preocupación es que los movimientos durante el fin de semana históricamente son poco fiables y pueden revertirse rápidamente debido al bajo volumen de negociación.
Bitcoin ahora se está alejando del soporte y acercándose a la resistencia, un punto donde el mercado se vuelve más frágil. La zona clave de soporte entre $81,620 y $83,640 sigue siendo sólida, y mientras BTC se mantenga por encima de ella, la estructura alcista permanece intacta. Una caída dentro de esta zona no rompería el patrón.
La resistencia inmediata se sitúa alrededor de $86,370, donde Bitcoin ya enfrenta presión. Incluso una ruptura temporal por encima de este nivel podría fracasar si no aparece un volumen de compra fuerte. La perspectiva a corto plazo se debilita si BTC cae por debajo de $84,230, el mínimo reciente.
Bitcoin se está acercando a una región de resistencia mucho mayor, entre $92,820 y $111,180. Esta zona es significativa porque es el destino esperado para una recuperación de la cuarta onda.
BTC podría pasar la próxima semana o dos moviéndose lentamente en esta dirección. El camino más probable implica un movimiento ascendente de tres ondas tipo A, seguido de un retroceso de onda B y un rebote final de onda C hacia la principal zona de resistencia. Esta estructura encaja con la fase correctiva más amplia que Bitcoin ha estado atravesando.
