Puntos clave:
Ethereum podría haber encontrado un piso en los $3.900, lo que señalaría un mínimo local.
Un raro patrón Power of 3 sugiere una posible ruptura del 80% al 100% en el cuarto trimestre.
Ether (ETH) podría haber marcado un mínimo local en los $3.900, con un patrón técnico clave que apunta a la posibilidad de otra ruptura a gran escala. Como se observa en el gráfico diario, los traders podrían estar siguiendo de cerca el regreso del modelo Power of 3 (PO3), también conocido como la configuración Acumulación-Manipulación-Distribución, que previamente llevó a ETH de $2.000 a $4.900 entre mayo y junio.
La estructura más reciente mostró una trayectoria similar. Los compradores de Ether acumularon entre $4.800 y $4.200 antes de que una caída rápida empujara el precio brevemente por debajo de los $4.000. El análisis de mercado interpreta este movimiento como una barrida deliberada de liquidez o caza de stops, limpiando la liquidez externa alrededor de los $4.180, un nivel ya señalado en análisis anteriores.
El retroceso, que coincidió con una brecha de valor justo diaria (FVG), ha reforzado la narrativa alcista en lugar de debilitarla, con el movimiento posiblemente repitiendo la configuración del segundo trimestre.
Los indicadores de momentum también refuerzan esta perspectiva. Tanto la media móvil simple de 25 días como la de 50 días están actuando como resistencias a corto plazo, siendo el próximo paso crítico un cierre diario decisivo por encima de los $4.500. Asegurar este nivel le daría a Ether una base sólida para su próximo avance.
A partir de aquí, los analistas esperan una posible ruptura del 80–100% a medida que avanza el cuarto trimestre, reflejando la magnitud de las ganancias vistas a principios de año. Con su reciente mínimo por debajo de los $3.900 pareciendo cada vez más un precio piso, Ether podría estar preparándose para probar nuevos máximos en las próximas semanas.
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Derivados de Ether y flujos spot
El open interest (OI) de Ether y el delta de volumen acumulado de futuros (CVD) han subido solo marginalmente mientras el precio ganó aproximadamente un 15% en una semana, lo que implica que el avance aún no está impulsado por apalancamiento y reduce el riesgo de liquidaciones forzadas de posiciones largas si el momentum se detiene, pero también sugiere espacio para que el OI se expanda y alimente una segunda etapa si la demanda spot persiste.
Por el contrario, una caída significativa en el CVD spot durante el alza indicó vendedores agresivos netos en spot durante la fortaleza, una divergencia bajista clásica que puede reflejar absorción por parte de órdenes pasivas o distribución de grandes holders, lo que a menudo precede a una volatilidad brusca si se pone a prueba el soporte. Si la absorción continúa y el precio se mantiene por encima de los niveles recuperados entre $4.200 y $4.400, los traders apalancados que estaban al margen podrían reingresar y extender la tendencia con volatilidad controlada.
Sin embargo, si la absorción alcista se desvanece, la divergencia aumenta el riesgo de retrocesos y la probabilidad de caídas bruscas de reversión a la media a medida que se barren bolsas de liquidez antes de que la tendencia continúe al alza.
Una zona de interés a corto plazo se define entre $4.100 y $4.250, donde la liquidez interna está densamente agrupada y se evidencian ineficiencias de volumen. El precio se movió previamente de forma abrupta a través de esta zona sin lograr una interacción equilibrada entre compradores y vendedores. Por lo tanto, si el momentum alcista no logra sostener un avance por encima de los $4.500 en los próximos días, esta zona podría actuar como un objetivo clave de retroceso o área de soporte para la reentrada del precio.
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